Me encanta el otoño, sus colores, sus olores y sus fiestas. Sobre todo las celebraciones tradicionales que nos acercan a la tierra.
Los que me seguís sabéis que me gusta el campo, los pueblos, sus gentes y las tradiciones. Me encanta todo lo que tiene sabor y sangre, que huele a tierra y a auténtico. Me gusta lo viejo, lo usado, las cosas que cuentan historias; por eso, cuando me hacen encargos para fiestas con arraigo y tradición como la que se celebra ahora en Herrera de Pisuerga con motivo de la cosecha de la patata no puedo evitar ponerme muy-muy contenta.
Me gusta utilizar los colores de la tierra y del otoño para estos diseños y texturas que recuerden al campo y al pueblo para darle ese toque rural y handmade que nos gusta a muchos.
En esta ocasión todo comenzó con un sencillo dibujo a rotulador al que le dimos color digitalmente. (Ya sabéis, haced clic sobre las imágenes para verlas en grande).
Mola mucho!
Kissitos!!